Las autoridades costarricenses lograron un importante golpe al crimen organizado internacional al detener a un ciudadano venezolano requerido por Interpol en Chile por los delitos de homicidio, secuestro y asociación delictiva.
El operativo se llevó a cabo en la frontera con Panamá, en el puesto de control migratorio de Paso Canoas. Allí, los agentes de la Policía de Migración interceptaron a Espinoza López, quien se encontraba en situación irregular en el país.
Según el ministro de Seguridad Pública de Costa Rica, Mario Zamora, el detenido es considerado un peligro para la sociedad y representa una amenaza para la seguridad regional. “Este caso demuestra la importancia de la cooperación internacional en la lucha contra el crimen organizado”, afirmó el ministro.
El venezolano será entregado a las autoridades chilenas a través de los canales diplomáticos correspondientes, para que enfrente la justicia por los delitos que se le imputan.
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